Indalecio Sobrino
INDALECIO SOBRINO (02/12/2016 - 08/01/17)
En 1940 nace en Santander Indalecio Sobrino Junco. Sus padres regentaban el popular Hotel México, situado en pleno centro de la ciudad. Su memoria de Santander es visual, fotográfica. Conoce todos sus rincones y anécdotas.
Realiza estudios de arte en el taller madrileño del maestro Pablo Sansegundo Castañeda, quien de sus muchos alumnos le distingue como el más fiel, noble y dotado.
Indalecio sobrino destaca, ya desde la infancia y juventud, por su gran facilidad para el dibujo. Es un dibujante nato. Con el lápiz se revela rápido, contumaz y preciso. Dibuja con soltura y limpieza y puede apresar en muy pocas líneas los temas más complejos y los ambientes más abigarrados.
La arquitectura de su obra es siempre el dibujo. Pero para que no se vea, para que no salte a la vista como presunción el mucho dibujo que lleva dentro, ni pueda decirse nunca que colorea sus dibujos, ha mucho decidió (siguiendo en esto al maestro Sansegundo) dibujar con el pincel, a punta de pincel, expresarse con el color.
Para comprender a nuestro artista hay, en primer lugar, que poner de manifiesto que es un humanista. O dicho en otras palabras: una persona a la que sólo le interesa lo humano, todo aquello que destila vida humanizada.
Un aspecto destacable de su obra actual es la representación de la acción, el ritmo, la atmósfera, entonado todo ello en dos tonos predominantes: el rojo y el negro.
Hacia donde se dirija en adelante su pintura está por ver. El pintor gusta de ser cronista de su época. Y donde otros ponen literatura. Él pone representación pictórica.